Samsung está padeciendo una muy mala racha, y es que debido a nuevos reportes de dispositivos Galaxy Note 7 que han explotado la compañía deberá detener la producción de sus terminales, además claro de tener que reponer los terminales afectados de los clientes.
Todos estos inconvenientes llevaron a la compañía a decidir detener la producción de sus nuevos dispositivos de forma temporal hasta que encuentren una solución adecuada, esto es lo que informa un proveedor directo de Samsung que decidió permanecer en el anonimato.
Esta suspensión en la producción estará afectando a la planta que tiene Samsung actualmente en Vietnam, y se debe realizar en cooperación con organismos reguladores de diferentes regiones, como Corea del Sur, EEUU y China.
Un duro golpe sin dudas para Samsung, que esta viendo como su terminal destinado a competir codo a codo con el nuevo iPhone 7 de Apple no podrá tener la inserción necesaria en el mercado, aunque sin dudas, es preferible detener la producción lo antes posible e intentar lanzar un producto acorde antes de que llegue el período navideño, de todas formas, es un hecho que esto terminará afectando negativamente la imagen de la compañía.